Por Debra A. Sokol-McKay, MS, CVRT, CDE, CLVT, OTR/L, SCLV
Actualizado por la Dra. Sefy Paulose, marzo de 2022

El Diagnóstico de la Enfermedad Diabética del Ojo

Por lo general, la retinopatía diabética no presenta signos de alerta tempranos. Se puede detectar sólo a través de un examen completo de los ojos, el cual busca los primeros signos de la enfermedad, entre ellos:
  • Fugas de los vasos sanguíneos
  • Edema macular (hinchazón de la mácula del ojo)
  • Depósitos pálidos y grasos en la retina
  • Daños en el tejido nervioso
  • Cualquier alteración en los vasos sanguíneos de la retina
Para diagnosticar la enfermedad diabética del ojo con eficacia, los especialistas en el cuidado de la vista recomiendan un examen ocular integral para diabéticos, que incluye los siguientes procedimientos:
  • Pruebas de agudeza visual para la visión lejana y cercana
  • Un examen de fondo del ojo dilatado, el cual requiere el uso de un oftalmoscopio. En el examen del ojo dilatado, la parte del ojo que se dilata es la pupila—no el ojo completo. Esto permite al examinador ver la retina a través de la pupila. Las pruebas de agudeza visual solamente no son suficientes para detectar la retinopatía diabética en sus primeras etapas.
  • Una prueba de tonometríapara medir la presión del fluido dentro del ojo.
  • Una prueba de angiografía con fluoresceína, si existieran sospechas de cambios en la retina más graves, como el edema macular. La angiografía con fluoresceína es un examen ocular que utiliza un tinte y una cámara especiales para observar el flujo sanguíneo en la retina.
  • Es posible que se realice una prueba de tomografía de coherencia óptica(TCO u OCT, por sus siglas en inglés) para fines de obtener una imagen más clara de la retina y sus capas de soporte. La TCO es un tipo de tecnología médica de imágenes que produce imágenes de alta resolución, transversales y tridimensionales del ojo.
  • Además, la prueba de la rejilla de Amsler puede detectar las primeras, y algunas veces sutiles, alteraciones visuales en una serie de enfermedades maculares, incluyendo el edema macular diabético.
La primera imagen que aparece a continuación muestra cómo una persona con discapacidad visual ve una rejilla de Amsler. La imagen que sigue es un ejemplo de una rejilla de Amsler anormal, como la ve una persona con enfermedad ocular. Estas imágenes de las rejillas son mucho más pequeñas que las de tamaño regular; las mostramos de este tamaño para poder mostrárselas a usted en esta página Web. Si usted ha sido diagnosticado con retinopatía diabética o con cualquier otra enfermedad ocular, pídele a su profesional de la visión una rejilla de Amsler de tamaño real para que pueda utilizarla en casa.

Amsler Grid as seen with normal vision Como lo ve una persona con visión normal

Amsler grid as seen by person with eye disease Ejemplo de una rejilla de Amsler anormal

Qué causa la enfermedad diabética de los ojos:

La retinopatía diabética es la causa principal de nuevos casos de ceguera y baja visión en adultos de 20 a 65 años de edad. “Retinopatía” es un término general que describe el daño a la retina, la cual es una estructura en la parte posterior del ojo. La retina es un tejido delgado y sensible a la luz que recubre la superficie interna del ojo. Las células nerviosas de la retina convierten la luz entrante en impulsos eléctricos. Estos impulsos eléctricos son transportados por el nervio óptico al cerebro, el cual interpreta los impulsos eléctricos como imágenes visuales. Cuando la diabetes está fuera de control, el exceso de azúcar causa daños a los vasos sanguíneos pequeños. Estos vasos sanguíneos transportan oxígeno y otros nutrientes que nutren el tejido y las células nerviosas de la retina. Sin un flujo sanguíneo adecuado, estas áreas de la retina se dañan o se vuelven isquémicas.

Entre los síntomas de la retinopatía diabética están:

  • Visión borrosa o visión doble
  • Luces intermitentes, las cuales pueden indicar un desprendimiento de la retina
  • Un velo, una nube o rayas rojas en el campo visual, o manchas oscuras o flotantes en uno o ambos ojos, que pueden indicar sangrado
  • Puntos ciegos o en blanco en el campo visual
Una simulación de los efectos oculares y funcionales de la retinopatía diabética
Una simulación de los efectos oculares y funcionales de la retinopatía diabética Henry Ford Center for Vision Rehabilitation and Research (Centro Henry Ford para la Investigación y la Rehabilitación Visual)

Los efectos oculares y funcionales de la retinopatía diabética pueden incluir cualquier o todos los siguientes síntomas:

  • Visión fluctuante en respuesta a cambios en los niveles de glucosa en sangre; la visión puede cambiar de un día a otro, o de la mañana a la noche.
  • La visión central borrosa causada por el edema macular puede interferir con la lectura.
  • La disminución de la agudeza visual puede provocar que no pueda ver las marcas en una jeringa de insulina o la pantalla en un glucómetro estándar.
  • Las “zonas muertas” o los “puntos ciegos” provocados por la pérdida de la visión pueden provocar que no pueda determinar bien el tamaño de las porciones de alimentos en un plato.
  • La disminución de la percepción de profundidad, en combinación con la disminución de la agudeza visual, le pueden hacer difícil que vea los bordillos de las aceras y los escalones, o le dificulte ir caminando a la clínica de diabetes.

Cómo afecta la diabetes a los ojos y la visión: Retinopatía diabética

Aunque las personas con diabetes tienen más probabilidades de desarrollar cataratas a una edad más temprana y tienen el doble de probabilidades de desarrollar glaucoma que las personas que no tienen diabetes, el principal problema de visión causado por la diabetes es la retinopatía diabética, la principal causa de nuevos casos de ceguera y baja visión en adultos de 20 a 65 años de edad:
  • “Retinopatía” es un término general que describe el daño a la retina.
  • La retina es un tejido delgado y sensible a la luz que recubre la superficie interna del ojo. Las células nerviosas de la retina convierten la luz entrante en impulsos eléctricos. Estos impulsos eléctricos son transportados por el nervio óptico al cerebro, el cual interpreta los impulsos eléctricos como imágenes visuales.
  • La retinopatía diabética ocurre cuando hay daños en los pequeños vasos sanguíneos, los cuales nutren el tejido y las células nerviosas de la retina.
  • “Proliferativo” es un término general que significa crecer o aumentar a un ritmo rápido mediante la producción de nuevos tejidos o células. Cuando el término “proliferativo” se utiliza en relación con la retinopatía diabética, describe el desarrollo, o proliferación, de nuevos vasos sanguíneos anormales en la retina. “No proliferativo” indica que este proceso aún no se está produciendo.
head shot of Vivian Vivian es una mujer de voz suave con fuertes opiniones y creencias religiosas y una gran determinación. Ella se describe como una persona ¡sumamente terca! Vivian fue diagnosticada con diabetes hace veinte años. Diez años después, fue diagnosticada con retinopatía diabética y estenosis espinal. Vivian dice, «Desde que se me presentaron estos problemas, he aprendido a apreciar lo que tengo. Me puedo despertar por la mañana y todavía ver las nubes, el cielo, los árboles, las flores y los pájaros, aunque no los vea con claridad. Estoy consciente de que no estoy ciega y por eso estoy muy agradecida. También he descubierto que las personas quieren ayudar. Desde que comencé a tener problemas de la vista, he descubierto que hay muchas personas que son muy consideradas. Me abren las puertas y me ayudan si me ven en dificultades. Me he dado cuenta de que las personas realmente tienen buen corazón. En mi propio círculo de amistades, no conozco a nadie con pérdida de la vista, pero han aceptado mi situación completamente.» Obtenga más información sobre las muchas maneras en que Ud. puede autocontrolar su diabetes y llevar una vida independiente:

Cuáles son los diferentes tipos de retinopatía diabética?

Hay dos tipos principales de retinopatía diabética: la retinopatía diabética no proliferativa y la retinopatía diabética proliferativa.
  • La retinopatía diabética no proliferativa es la forma menos grave. En la etapa de retinopatía no proliferativa leve, se producen pequeñas áreas de edema (hinchazón), como globitos, en los pequeños vasos sanguíneos de la retina. Esto puede ser visto por su médico como pequeñas manchas de sangre. La retinopatía no proliferativa moderada produce que se dañen más vasos sanguíneos, lo que causa un empeoramiento del daño a la retina. La retinopatía no proliferativa grave se clasifica como muchos más daños en los vasos sanguíneos que interrumpen el suministro de sangre de la retina. Esta retina dañada provoca la liberación de una señal para que se produzcan nuevos vasos sanguíneos.
  • “Proliferativo” es un término general que significa crecer o aumentar a un ritmo rápido mediante la producción de nuevos tejidos o células. Cuando el término “proliferativo” se utiliza en relación con la retinopatía diabética, describe el desarrollo, o proliferación, de nuevos vasos sanguíneos anormales en la retina. Esto ocurre porque la retina dañada intenta protegerse mediante la creación de nuevos vasos sanguíneos a través de una proteína mensajera llamada FCEV (factor de crecimiento endotelial vascular [o VEGF, por sus siglas en inglés]). Sin embargo, este intento es inútil, ya que esos nuevos vasos sanguíneos son anormales, débiles, se rompen y sangran. Esos nuevos vasos sanguíneos crecen en toda la retina, así como en el vítreo, la sustancia gelatinosa transparente que llena el interior del ojo. Estos vasos sanguíneos luego causan hemorragias y tejidos cicatriciales, los cuales se pueden desarrollar y tirar de la retina provocando más daño e incluso desprendimiento de la retina.
Además, el fluido puede filtrarse a la mácula, un área sensible y pequeña localizada en el centro de la retina, la cual permite ver detalles. Este fluido puede provocar edema macular (o hinchazón de la mácula). Esto puede ocurrir en cualquier etapa de la retinopatía diabética, aunque es más probable que ocurra a medida que la enfermedad progresa.

¿Qué pasará durante mi cita?

Como es posible que no note ninguna indicación o señal de retinopatía diabética, la mejor manera de protegerse es hacer una cita anual para que le examinen la vista. Durante este examen, un oftalmólogo u optometrista podrá evaluar qué tan saludable está su retina y si tiene algún signo de retinopatía diabética mediante un examen ocular completo, el cual incluye todos los siguientes componentes: Un historial de salud y medicamentos
  • Su salud general y cuántos años ha tenido diabetes
  • Los medicamentos que está tomando para la diabetes (insulina o medicamentos orales)
  • Sus resultados de A1C más recientes

    Pruebas de agudeza visual

    • Pruebas de agudeza visual cercana y lejana para determinar la nitidez o claridad de su visión para leer y para ver de lejos
    • Analizar su visión con diferentes lentes (a veces estos lentes están todos integrados en una máquina llamada foróptero) para determinar si su visión puede mejorarse o corregirse con gafas o lentes de contacto regulares.Preguntas sobre cualquier otra enfermedad vascular, como presión arterial alta, antecedentes de accidente cerebrovascular, enfermedad de las arterias coronariasPruebas de agudeza visual

Una evaluación de la salud ocular

  • Su médico utiliza una linterna estilo bolígrafo para evaluar la existencia de algún defecto pupilar aferente relativo. Esta información le puede ayudar indirectamente a su médico a determinar si hay alguna disfunción nerviosa en un ojo en comparación con el otro.
  • Se utiliza un tonómetro ocular, una máquina que se usa para medir la presión, para evaluar la cantidad de humor acuoso, o sea, la presión dentro de los ojos. Hay varias maneras e instrumentos para medir la presión dentro de los ojos, entre ellos, una máquina que expulsa una bocanada de aire, una sonda similar a un bolígrafo que presiona ligeramente la superficie del ojo, o una herramienta integrada a la lámpara de hendidura misma que presiona ligeramente la superficie del ojo. Posiblemente su médico se refiera a esta presión como presión intraocular (“dentro del ojo”), o PIO.
  • Se utiliza un microscopio especial, llamado lámpara de hendidura, para examinar el segmento anterior del ojo (tercio anterior del globo ocular), que incluye la córnea, la pupila, el iris, el cristalino y las estructuras de drenaje acuoso. Específicamente, su médico examinará para ver si hay algún signo de que se están desarrollando vasos sanguíneos en el iris, que es un signo de retinopatía diabética proliferativa debido al crecimiento anormal de los vasos sanguíneos.
  • Un examen de ojo dilatado (o fondo de ojo), que se realiza mediante el uso de lentes especiales, le permitirá al médico ver dentro del ojo y examinar la retina. Su médico podría optar por usar gotas oftálmicas para ver la retina y el nervio óptico con más claridad. Durante este examen, el médico examinará la mácula, localizada en el centro de la retina, para ver si hay signos de fluido o edema. Luego se le pedirá que mire en diferentes direcciones para que su médico pueda examinar cada sección de la retina y evaluar si hay indicaciones de sangrado, edema, vasos sanguíneos anormales y demás.

Pruebas adicionales para la retinopatía diabética

Si su oftalmólogo sospecha que su retinopatía diabética está progresando, tendrá que someterse a pruebas adicionales que pueden ayudar a su médico a hacer un diagnóstico más definitivo en cuanto a la etapa de la retinopatía.

Gonioscopia

  • Examinar el sistema de drenaje del ojo es un aspecto importante de la evaluación de la retinopatía diabética proliferativa. Los vasos sanguíneos anormales pueden desarrollarse a partir de la retina, seguir por el vítreo (la sustancia gelatinosa transparente que llena el interior del ojo), y llegar a la parte frontal del ojo e invadir el iris y el sistema de drenaje del ojo. Si esto ocurriera, el diagnóstico puede cambiar de “retinopatía diabética proliferativa” a “glaucoma neovascular”, una complicación grave de la retinopatía diabética proliferativa. El glaucoma neovascular es una forma secundaria de glaucoma de ángulo abierto (link to open angle glaucoma) que se produce a consecuencia del bloqueo del sistema de drenaje producido por los vasos sanguíneos anormales que fueron creados por la retina dañada. En estos casos, la capacidad del ojo para drenar fluidos, o sea, el humor acuoso, es bloqueada por estos vasos sanguíneos anormales causando un aumento de la presión ocular, que luego puede causar daño al nervio óptico.
  • Para ver el sistema de drenaje del ojo, se debe realizar una prueba de lente de contacto con espejo, llamada gonioscopia. Para realizar este examen, el médico adormecerá la superficie del ojo con una gota de anestesia. Luego, se coloca una lente, llamada gonioscopio, en la superficie del ojo -como una lente de contacto grande. El médico le pedirá que mire hacia el frente, luego usará la lámpara de hendidura para mirar a través de la lente y ver si hay vasos sanguíneos en el sistema de drenaje.

TCO

  • A medida que la retinopatía diabética progresa, el fluido puede filtrarse a la mácula, un área sensible y pequeña localizada el centro de la retina, la cual permite ver detalles.
  • Esto puede ser evaluado por su médico subjetivamente mirando la mácula. Sin embargo, es posible que su médico quiera evaluar esto objetivamente con una máquina que mide el edema (hinchazón) de la mácula. Esta prueba se realiza a través de una prueba de imagen no invasiva llamada Tomografía de Coherencia Óptica, o TCO.
  • El técnico o el fotógrafo ocular le hará descansar la cabeza sobre un mentón y le pedirá que mire directamente a un punto. La máquina entonces se enfocará en la mácula y explorará el área para medir el grosor de cada dirección. Su médico podrá ver estos resultados y evaluar la progresión del edema macular al comparar estos resultados con los resultados de pruebas anteriores o futuras.

Angiografía con fluoresceína

  • Con el fin de evaluar mejor el grado de retinopatía diabética, se puede realizar un tipo de imagen especial llamada “angiografía con fluoresceína”; esto se realiza en el consultorio médico. Tarda menos de 30 minutos.
  • Para que le realicen esta imagen, será necesario que le dilaten los ojos.
  • El técnico o el fotógrafo ocular le hará descansar la cabeza sobre un mentón y le pedirá que mire directamente a un punto. La máquina entonces se enfocará en la retina, en preparación a la toma de fotos.
  • Luego, se le inyectará un tinte de color amarillo, llamado fluoresceína, en una vena del brazo. Este tinte permite que los vasos sanguíneos brillen intensamente. La fluoresceína tarda unos 15 segundos en viajar por todo el cuerpo y llegar a los vasos sanguíneos en la parte posterior del ojo, o sea, la retina. En ese momento, la cámara especial tomará fotos de la retina. Su médico podrá ver estos resultados y evaluar el nivel de fuga, edema, sangre, nuevos vasos sanguíneos anormales y demás en la parte posterior de su ojo.